No se libró el equipo de la exigencia del público al descanso, buscando un Sevilla más atinado en los segundos 45 minutos. Y aunque fue Jason el primero en probar fortuna, sí que se pudo ver a los de casa algo más dominadores. Seguía faltando la coordinación en muchas fases del juego, pero el envalentonado Levante ya no arriesgaba tanto cuando recuperaba la pelota. Con los laterales muy ofensivos, Berizzo optó por más presencia en el centro con la salida de Franco Vázquez, mientras que poco después salió Navas por Mercado, convirtiéndose así en el jugador con más partidos oficiales de la historia nervionense.

Con el paso de los minutos el Sevilla se hizo más dominador, pero no consiguió batir a Oier

Con la obligación de quemar todas sus naves, el técnico argentino optó por el colombiano Muriel con sólo diez minutos por delante, mientras la tensión de un guión tan impreciso impacientaba a la grada. Ben Yedder, Sarabia y Escudero fueron los últimos en probar a Oier pero no hubo forma de superar al guardameta vasco, que permitió a su equipo salir del Ramón Sánchez-Pizjuán con un punto. Las pérdidas de tiempo granotas y los cuatro minutos de alargue no fueron suficientes para remediar las cosas y todo acabó con el reparto de puntos.

Última cita en casa antes de la Navidad, pero aún quedará visitar Anoeta para enfrentarse a la Real Sociedad el próximo miércoles a las 21.30 horas. Un partido en el que no podrá estar Clement Lenglet, el primero de los jugadores sevillistas que se pierde un partido esta temporada por acumulación de amonestaciones. Será la última oportunidad para acabar el año con una sonrisa que dé paso al descanso hasta que la Copa retome la competición ya en enero.