El lateral recuerda con mucha alegría su paso por Nervión: «Yo me pongo a veces en casa a hablar de fútbol con mis hijos y me doy cuenta de que estoy bendecido por haber pasado por las mejores épocas de mis clubes. Fueron años mágicos, de ganar títulos y de jugar un buen fútbol, porque en el Sevilla jugábamos de libro. Recuerdo remontadas épicas contra el Barcelona y el Madrid. Era un conjunto, el equipo y la afición. Para mí va a ser difícil volver a vivir eso. Es algo inolvidable».

Si se tiene que quedar con un partido, elige la Supercopa de Europa ganada al Barcelona: «Para mí fue el mejor, porque hablando de aquel Barcelona era un equipazo. Mirases para donde mirases había jugadores increíbles y tenían a Ronaldinho, que en aquella época marcaba mucho la diferencia. Ya estaban Messi, Iniesta, Xavi… Dani Alves fue elegido el mejor jugador de la final y con justicia».

«En la Supercopa de Europa el Barcelona tenía un equipazo, pero Alves fue el mejor»

Eso sí, él fue mucho más protagonista en Glasgow: «Venía de una lesión y casi no llego al partido. Pude recuperarme gracias a la gente del club, que se volcó. En aquel partido teníamos mucha confianza y una moral muy grande. Respetábamos a todos los rivales, pero sabíamos lo que queríamos y nos conocíamos muy bien todos con una mirada. Ahí conseguimos demostrar que el Sevilla ya era un equipo grande«.

Además, también recuerda su despedida en Costa Ballena: «Lloré muchísimo. Estaba feliz porque iba a jugar en un gran equipo como el Barça, pero triste por dejar a muchos amigos. Era una decisión muy importante y un reto para mi carrera, también en lo personal. Pero fue duro y veía como una película con todos los momentos vividos allí. Recibí mucho reconocimiento como jugador pero también como persona y eso es lo que se lleva uno.

«Fue duro marcharme del Sevilla porque dejaba a muchos amigos»

«En Sevilla no he vivido momentos malos. Solo las lesiones, momentos en los que aprendí mucho y donde aprendí a cuidarme para poder rendir. Hay que ser disciplinado para poder aguantar todos estos años a un nivel alto», aseguraba el de Coritiba.

Por último, quiso dar una mirada al futuro: «Me quedan pocos años de futbolista pero quiero seguir en el mundo del fútbol. Ahora estoy en una empresa de agentes, pero mi mujer siempre me dice que tengo que hacer el curso de entrenador. Todavía no lo sé».