Cruz comenzó explicando la discrepancia por parte de los auditores en el capítulo de ingresos y gastos. «Al suspenderse las competiciones por la pandemia, algunos partidos se jugaron en junio, julio y agosto. La entidad, tras analizar pros y contras, tomó la decisión de imputar todos los ingresos televisivos y de UEFA al ejercicio 19/20, aunque algunos partidos se disputaran transcurrido el ejercicio. Otros clubes han hecho lo mismo y, tras consultar con LaLiga y UEFA, se nos dijo que estábamos en nuestro derecho. El informe tiene esa salvedad, pues los auditores entienden que la práctica no es la correcta y que nuestros ingresos 19/20 están sobrevalorados en una cantidad de 11.650.000 euros netos. Eso no tiene ninguna consecuencia para la entidad. Los auditores tienen que reflejarlo porque es su obligación y la JGA tiene la facultad de aprobar o no dichas cuentas».
Cruz anunció una cifra de negocio de 145 millones, con un capítulo de enajenaciones y plusvalías de 65,4 millones y otros 7 millones de euros, que no pueden considerarse dentro de la cifra de negocio pero obedecen a cesiones y otros resultados no vinculados a la venta de futbolistas. Hay un total de 217,7 millones de ingresos, siendo los principales componentes de gastos el coste de la plantilla inscribible, -gasto salarial del primer equipo-, que han sido 100,2 millones, así como el coste de amortizaciones más el coste de cesiones como Bono y Reguilón que suman 64,5 millones. El coste total es de 164,8 millones, superior en 30 millones al de la 18/19.
El total de ingresos es de 217,7 millones de euros
En cuanto a gastos de estructura es de 35,4 millones. Menos que otros años, porque se han visto afectados por la pandemia. Los costes deportivos son de 24 millones correspondiente al personal que no es primera plantilla, así como a la remuneración del consejo. La columna de «Otros» es el reflejo de un ingreso por reversión de provisiones, que hemos revertido porque las provisiones eran innecesarias. El total de gastos es de 50 millones de euros. Esto da un total de 1.183.000 euros de beneficios, algo menos que temporada anterior.
El desglose del capítulo de ingresos es de 36 millones de premios por competiciones, sobre todo por la consecución de la Europa League. 8,1 millones de abonados, pues la cantidad inicial que el club cobró fueron unos 13 millones, pero se ha devuelto lo proporcional a los partidos sin público e incluso se bonificó a los abonados con un vale. Ese coste está ya recogido. Por retransmisión de Liga, un ingreso de 82,6 millones y por Marketing, 17,9 millones.
La propuesta de distribución del resultado se aprobó por un 81,06%
En cuanto a los cuatro ratios principales de LaLiga, todos están con color azul porque son positivos. Se permiten hasta 5 millones de pérdidas y se han acumulado beneficios en los últimos años. El gasto de plantilla inscribible límite está muy por debajo de lo establecido, mientras que en el ratio de deuda neta estamos en el 20,3%, siendo el límite del 100%. El ratio de pasivo exigible ajustado está en 98,4 millones cuando el patrimonio mínimo es de 50 millones. «Casi lo doblamos».
Por ello, se aprobó -con el 81,06% de los votos- un reparto de dividendos de 413.878 euros -un total de 4 euros por acción- así como la cantidad restante de 769.439,15 euros de beneficios destinado a reservas voluntarias.
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