El trabajo en tierras niponas ha sido bueno para el cancerbero: «Se ha visto un buen ritmo pese a llevar poco tiempo trabajando. A pesar de la derrota estamos contentos con estos días en Japón. Ahora toca empezar otro bloque de trabajo a partir del martes».

Con el aliciente de contar con un nuevo técnico en el banquillo, toca pelear por la titularidad: «Hay un entrenador nuevo y hay que competir sanamente por el puesto. Que cada uno exponga sus armas y luego decida el míster a quién quiere poner».