Tras la conferencia, Felipe Del Valle atendió a Mundo Deportivo, donde reconoció que «La figura del nutricionista en los clubes está cada vez más asentado. Hay tres campos de actuación, el diseño de menú, de la composición corporal para predecir el peso óptimo de competición, y la confección de unas pautas de ayudas o suplementos alimenticios, apoyados en los datos que tenemos GPS y de las analíticas que se realizan cada cuatro o seis semanas. El futbolista de hace diez años no tiene nada que ver con el actual. Ahora son mucho más conocedores de la importancia de la nutrición. Hay semanas con mucha congestión competitiva y en algunos casos hay menos de 72 horas entre partidos, un tiempo límite para recuperar el glucógeno muscular, que es la gasolina del jugador».