Es el punto en el que el director deportivo pregunta al técnico qué tipo de jugador prefiere para reforzar una determinada posición. A partir de ahí, es labor de Monchi saber traducir esas características y destacar en su lista los jugadores que pueden cumplir con mayor exactitud con esas condiciones. Para Monchi es importante saber si hay uno o varios jugadores que el entrenador conozca o le guste especialmente, pues a partir de ese momento, ese jugador o jugadores se convertirán en la primera opción.

Y es que con ello, el director deportivo consigue ir de la mano con su entrenador y además gana un aliado de cara al siguiente paso, que se verá ya en el capítulo del próximo lunes y que es el de la negociación. En este episodio, Monchi introduce otro concepto, en este caso inspirado en unas declaraciones de Rafa Benítez cuando el Valencia le firmó a Cannobio. Habla de la «lámpara y la mesa», en relación a la importancia de que si un entrenador pide un determinado perfil de futbolista, el director deportivo debe cumplir con esa petición, pues que el entrenador tenga una plantilla con jugadores que no logren adaptarse a su fútbol puede tener consecuencias muy negativas.